¿Apoyo del Gobierno?

¿Qué pensar cuando alguien pide APOYO del Gobierno? La pregunta me viene a la cabeza y, debo admitirlo, nunca se me había pasado por la mente, ¿en qué momento se transformó la responsabilidad del trabajo del Gobierno al servicio del pueblo en ayuda caritativa? 

Mientras que en México taladran a la población con medidas destripadoras neoliberales en nombre del progreso, de la modernidad y de las vías del desarrollo. Del otro lado del mundo, en el mal llamado "primer mundo", esas medidas se toman con toda cautela para proteger la producción y a la población nacional. ¿Qué ilusión tan barata y falta de dignificación nos han metido a la fuerza? 

Y es que las personas que hoy se sientan tras sus escritorios de burócratas no saben lo que es hacer política. No tienen ética y menos dignidad, porque nunca la han conocido, porque los han enseñado así, porque así ha sido históricamente, porque nacieron ya en un escenario corrupto y, porque en sus pequeñísimos cerebros encriptados nunca podrá germinar la idea de que las cosas se pueden hacer de una manera diferente. 

Esto, apropósito de las recientes manifestaciones de las personas afectadas por los sismos del 7 y 19 de septiembre en México. Ellos han salido a la calle, como siempre, a pedir APOYO del gobierno para la reconstrucción de sus casas, cuando, ¡caray!, ese tipo de cosas ni siquiera se deberían de pedir, deberían, al menos eso creo, ser responsabilidades y acciones inmediatas por parte de un gobierno, cualquier que este sea.